OUC puede ayudarle a determinar qué tipo de iluminación es la más adecuada para su negocio:

Incandescente:

Las bombillas incandescentes producen luz cuando la corriente eléctrica pasa por un filamento y hace que brille. Debido a que son menos eficientes en consumo de energía que las otras fuentes de luz, tienen un mejor uso para la iluminación de tareas que demandan mayores niveles de brillo.

Desde 2012, la Ley de Independencia y Energía de EE. UU. de 2007 requirió más bombillas incandescentes para producir la misma cantidad de luz con menos vataje.

Las bombillas incandescentes reflectantes tienen un revestimiento reflectante dentro de la bombilla que dirige la luz en una dirección en vez de dirigirla a todo su alrededor.

Las bombillas incandescentes halógenas de tungsteno producen una luz más brillante y más blanca que otras bombillas incandescentes. También tienen una vida útil más prolongada y brindan más luz por vatio que las bombillas incandescentes estándar, lo cual hace que sean una elección más eficiente. Las bombillas halógenas están disponibles en dos tipos: voltaje de línea (120 vatios) y bajo voltaje (12 voltios).

LED:

Los LED (diodos emisores de luz) producen luz cuando el voltaje se aplica a semiconductores cargados negativamente, haciendo que los electrones se combinen y creen una unidad de luz (fotón). En términos más simples, una luz LED es un chip químico incorporado en una cápsula plástica. Debido a que son pequeñas, muchas luces LED a veces se combinan para producir una simple bombilla de luz.

Las luces LED tienen muchas ventajas sobre las fuentes de luz incandescentes, como menos consumo de energía, mayor vida útil, resistencia física mejorada, tamaño más pequeño y encendido más rápido. Los diodos emisores de luz ahora se utilizan en aplicaciones tan diversas como en la iluminación en el área de la aviación, faros de los automóviles, publicidad, iluminación general, semáforos y flashes de las cámaras. Sin embargo, las luces LED para la iluminación general requieren difusión de calor y corriente más precisa que las lámparas fluorescentes compactas de salida comparable.

Fluorescente - T5/T8/T12:

La luz fluorescente genera luz cuando un arco eléctrico pasa entre los cátodos para estimular el mercurio y otros gases que producen energía radiante, que luego se convierte en luz visible por una capa de fósforo.

Utilizan de 1/5 a 1/3 de la misma cantidad de electricidad que una bombilla incandescente con clasificaciones de lúmenes comparables y duran hasta 20 veces más. Las bombillas de tipo compacto se utilizan en instalaciones más pequeñas y más elegantes como en las luces empotrables, luces de pared, accesorios cercanos al techo e iluminación por riel. Las bombillas de tipo roscado pueden utilizarse en lugar de las bombillas incandescentes en portalámparas estándares. Están disponibles en un amplio espectro de temperaturas de color. Los tonos blancos cálidos duplican mejor el color de la bombilla incandescente.

Las bombillas fluorescentes actuales vienen en una amplia selección de tamaños y pueden producir tonos cálidos de luz similares a las bombillas incandescentes. Si sus artefactos tienen un sistema de regulación, busque bombillas fluorescentes que en su etiqueta diga "regulable". Debido a que las bombillas fluorescentes contienen mercurio, es importante desecharlas de manera adecuada.

CFL:

 Las bombillas compactas de luz fluorescente (CFL) combinan el ahorro de energía de la iluminación fluorescente con la conveniencia y la popularidad de las bombillas incandescentes. Las bombillas CFL se adaptan a la mayoría de los artefactos diseñados para bombillas incandescentes y consumen alrededor de un 75% menos de energía.

Aunque las bombillas CFL cuestan un poco más que las bombillas incandescentes comparables, duran entre 6 y 15 veces más (6,000 a 15,000 horas). Observe cómo se comparan las bombillas ecológicas con las incandescentes tradicionales, y descubra cómo funcionan las CFL.

Las CFL son más rentables y eficientes en áreas donde las luces están encendidas por periodos de tiempo prolongados. Experimentará un plazo de recuperación más lento en áreas donde las luces se encienden por periodos cortos de tiempo. Debido a que las CFL no se tienen que cambiar con frecuencia, son ideales para áreas de difícil acceso.

HID:

Las bombillas de descarga de alta densidad (HID) producen luz cuando un arco pasa entre los cátodos en un tubo presurizado, haciendo que los aditivos metálicos se evaporicen. Tienen una prolongada vida útil y un consumo extremadamente bajo. Con la excepción de las lámparas de haluro metálico, las bombillas de HID generalmente no producen colores claros agradables. En ámbitos residenciales, las bombillas de HID se usan con mayor frecuencia en seguridad para exteriores y en la iluminación de superficies.

Hay cuatro tipos de bombillas de HID:

• Las lámparas de haluro metálico tienen mayor eficacia lumínica, entre 75 y 100 lúmenes por vatio, lo cual equivale a aproximadamente dos veces las luces de vapor de mercurio y de 3 a 5 veces las luces incandescentes, y producen una luz blanca intensa. La vida útil de las lámparas varía de 6,000 a 15,000 horas. Los haluros metálicos, una de las fuentes más eficientes de luz blanca de alto índice de rendimiento cromático (CRI), han sido, desde 2005, el segmento de más rápido crecimiento en la industria de la iluminación. Se utilizan en superficies amplias, en iluminaciones superiores de espacios comerciales, industriales y públicos como playas de estacionamiento, ámbitos deportivos, fábricas y establecimientos minoristas.


• Las lámparas de sodio de baja presión son lámparas de descarga de gas que utilizan sodio en un estado de excitación para producir luz. Existen dos variedades de este tipo de lámparas: baja presión y alta presión. Las lámparas de sodio de baja presión son fuentes de luz altamente eficientes, pero su luz amarilla restringe las aplicaciones de iluminación en exteriores, como las farolas.


• Las lámparas de sodio de alta presión tienen un espectro de luz más amplio que las de baja presión, pero la reproducción de color es aún más pobre que los otros tipos de lámparas. Las lámparas de vapor de sodio producen menos contaminación de luz que las lámparas de vapor de mercurio.


• Las lámparas de vapor de mercurio ahorran más electricidad que las luces incandescentes y la mayoría de las fluorescentes, y tienen una eficacia lumínica de 35 a 65 lúmenes por vatio. Entre sus otras ventajas se incluyen una bombilla de vida útil prolongada, aproximadamente 24,000 horas, que produce luz blanca brillante. Por estos motivos, se utilizan en iluminaciones superiores de áreas grandes, como en fábricas, depósitos, establecimientos deportivos e iluminación pública. Las lámparas de mercurio transparentes producen luz blanca con un matiz verde azulado debido a la combinación de mercurio de las líneas espectrales. Esto no favorece al color de la piel humana, por lo que dichas lámparas no se utilizan normalmente en entornos minoristas.

– Fuente: American Lighting Association

Sistema de control de iluminación:

Es una red inteligente basada en la solución de control de iluminación que incorpora comunicación entre entradas y salidas de varios sistemas relacionados con el control de la iluminación con el uso de uno o más dispositivos informáticos centrales. Los sistemas de control de iluminación se usan ampliamente tanto en la iluminación de interiores como en la iluminación de exteriores de espacios comerciales, industriales y residenciales. Los sistemas de control de iluminación sirven para proporcionar la cantidad correcta de luz donde y cuando se necesita.

Los sistemas de control de iluminación se emplean para maximizar el ahorro de energía desde el sistema de iluminación, cumplir con los códigos de edificación o con los programas de edificios ecológicos y conservación de energía. Los sistemas de control de iluminación con frecuencia hacen referencia a la iluminación inteligente.

La principal ventaja de un sistema de control de iluminación sobre los controles de iluminación independientes o el encendido manual convencional es la capacidad de controlar las luces individuales o grupos de luces desde un dispositivo de interfaz simple por parte del usuario. Esta capacidad de controlar múltiples fuentes de luces desde un dispositivo permite que se creen escenarios de iluminación complejos. Una sala puede tener múltiples escenarios preestablecidos, cada uno creado para diferentes actividades de la sala. El principal beneficio de los sistemas de control de iluminación es la reducción del consumo de energía. También se ha logrado la vida útil más prolongada de las lámparas al regular y apagar las luces cuando no se las utiliza. Los sistemas de control de iluminación inalámbricos proporcionan beneficios adicionales que incluyen menores costos de instalación y mayor flexibilidad sobre dónde pueden colocarse los interruptores y los sensores.

Los sistemas de control de iluminación normalmente proporcionan la habilidad de adaptar, de manera automática, la salida de dispositivos de iluminación en base a:

• Tiempo cronológico (hora del día)
• Hora astronómica (amanecer/atardecer)
• Habitabilidad mediante el uso de sensores de habitabilidad
• Disponibilidad de luz de día mediante el uso de fotocélulas
• Condiciones de alarma
• Lógica de programa (combinación de eventos)

– Fuente: Lighting Controls Handbook, Fairmont Press, Fairmont Press